Me gusta ser independiente, no andar molestando a otros para que trabajen por mí; así que ayer, viendo que la memoria de la cámara de fotos estaba casi llena, decidí volcar las imágenes en el ordenador.
Primer paso: encontrar el cable adecuado. En la bolsa de la cámara no venía, y lo sé porque probé a enchufar todos los que había. Al final encontré uno en un cajón.
Segundo paso: encontrar el agujero correspondiente en la misma cámara. Le di varias vueltas, examinándola detenidamente, y al cabo de un cuarto de hora descubrí una tapita que se podía mover. La abrí y allí estaba: la conexión que coincidía con el otro extremo de mi cable.
Tercer paso: ¿Cuál es la letra correspondiente a la cámara? Tenemos tantos periféricos instalados que tuve que abrirlos todos. Es decir, que cuando voy al disco duro me encuentro varias etiquetas que ponen "disco extraíble (F:), disco extraíble (G:) ... hasta la M.
El ordenador me pregunta qué quiero hacer con las imágenes, y pincho en la opción que me parece acertada.
Cuarto paso: llamar a Manolo y decirle que he descargado las fotos en el ordenador, (lo que yo no consiga...) pero lamentablemente, no sé a qué carpeta han ido a parar, se han borrado de la cámara, y no puedo encontrarlas.
La próxima vez, lo haré todo en un paso, tan sencillo como decir: Manolo, la cámara está llena, haz el favor de volcar las fotos en el ordenador, y en cinco minutos lo tendré arreglado.
jueves, 29 de abril de 2010
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